Siento mucho los retrasos, actualizaré el blog de vez en cuando, pero tened paciencia, please:



La vida de un sacerdote en Madrid es algo compleja, hacemos lo que podemos y que Dios ponga el resto. Si quieres contribuir pide a Dios que nos envíe más sacerdotes.

Un fuerte abrazo

viernes, 30 de marzo de 2012

Se nos va Don Francisco...

Ayer le dieron el nombramiento y tomará posesión hacia el 25 de abril...

Don Francisco, como se diría antiguamente: el primer teniente coadjutor, hoy se dice el vicario parroquial más antiguo que tenemos, se va de párroco a San Marcos.

Es una parroquia con solera, de hecho es la parroquia donde se bautizó mi madre. Parroquia augusta del siglo XVIII. Una parroquia que hoy no tiene ni catequistas, pero que dentro de poco resucitará.

Las parroquias necesitan un poco de cuidado y poder contar con el párroco para crecer. Y por fin, San Marcos, a la que tengo mucho cariño, va a contar con un párroco formidable.

El sacerdote de la parroquia con mayor bagaje cultural y teológico, que no se ha movido de esta parroquia durante años para cuidar a su madre, pasa "a mejor vida"... (como dijo el vicario episcopal de la VIIª, don José Luis Huéscar, cuando nos anunció a los sacerdotes del arciprestazgo su decisión). 


Han decidido que quieren cuidar las parroquias de la "almendra" de Madrid y el vicario y los obispos están haciendo un esfuerzo por mandar sacerdotes bien formados que puedan acompañar a unos feligreses que quizás, por no dar problemas, les hemos dejado un pelín descuidados en los últimos tiempos. Dejaron de ser parroquias apetecibles porque la población envejeció y no se trabajaron pastoralmente.


Gracias a Dios que a partir de ahora van a tener un párroco que cuide el confesionario y la vida interior de sus feligreses. A veces, la Iglesia sí hace bien las cosas.

1 comentario:

  1. Angel José Sastre30 de marzo de 2012, 20:14

    Mis mejres deseos para D.Francisco. Que cuente con mis rezos y ayuda si la necesita. Creo que desde hace muchos años la Iglesia realiza MUY BIEN las cosas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar