Dos cocineras super-mega-fantásticas; ocho mandos adultos espectaculares; dos premonitoras estupendas y 54 niños magníficos... No podían tener otra convivencia.
Nos ha llovido, granizado, nevado y hasta hemos sufrido una ventisca, pero la jefa de la convivencia lo había preparado todo y hemos disfrutado como enanos. Los mandos han servido como fieras, renunciando a todo por los niños, los niños han comido mejor que en sus propias casas y se lo han pasado genial y además han rezado como cristianos que aman al Señor.
No hemos hecho nada especial, simplemente había mucha gente rezando por nosotros y cada uno de los responsables del grupo han puesto todo lo que estaba de su parte. Incluso Don Manuel, nuestro párroco, ha venido a hacernos una visita el sábado.
Los chavales nos pedían que montáramos un campamento de verano, han salido encantados y hemos cumplido todos los propósitos y proyectos que teníamos. No sólo se lo han pasado bien, que para eso no montamos nosotros las convivencias, sino que se han formado, han rezado, han ido a Misa todos los días y muchos se han podido confesar... ¡Un éxito en todos los sentidos!
Gracias a todos los que habéis rezado por el éxito de la convivencia, gracias a vosotros ha salido fenomenal y muchos de los que no venían a ningún grupo de catequesis de la parroquia van a comenzar ahora su formación cristiana. ¿Qué más podemos pedir?
Hemos comenzado este año con las actividades para chavales y ya van viento en popa, a toda vela... ¡Gracias a Dios!
El próximo curso, si Dios quiere, montaremos 2 convivencias y 1 campamento de verano.
Un fuerte abrazo
El próximo curso, si Dios quiere, montaremos 2 convivencias y 1 campamento de verano.
Un fuerte abrazo
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